El piloto francés de 27 años, con su habitual casco azul y amarillo, se han enfundado en un mono negro y ha comenzado a rodar al volante de uno de los monoplazas de la Scuderia Toro Rosso en una mañana despejada pero fría en Jerez.

El piloto ha manifestado su deseo de poder tener un volante en la Fórmula Uno en 2008.

El representante de Robert Doornbos ha negado los comentarios de Gerhard Berger, que recientemente dejaba caer que el piloto holandés figuraba en la lista de candidatos a ocupar uno de los dos asientos oficiales del equipo Toro Rosso en 2007.

"Esta prueba es sólo una evaluación y si a Toro Rosso le gusta lo que ve, podríamos ver a dónde nos lleva en el 2008", declaró el galo. "Si no están contentos con lo que haga en Jerez, pueden decirme que me pierda".

El piloto francés admitió que varios jefes de escudería mostraron cierto interés en lo que podría hacer con un F1, pero "sólo Toro Rosso ha hecho algo al respecto. Lo cierto es que surgió de la nada. Pensé que la ventana para la F1 ya estaba cerrada, pero al día siguiente recibí la llamada".

Francia no tiene pilotos en la F1 en la actualidad. Franck Montagny compitió para el equipo Super Aguri este año y ahora es piloto de pruebas de Toyota.

Un aval para su posible incorporación a la parrilla, le viene de Gherard Berger, manager general de Toro Rosso, que ha manifestado en una revista especializada británica que le "gustaría que él tuviera una oportunidad. Creo que está haciendo un magnífico trabajo en Estados Unidos y me gustaría verle aquí. Lo hace bien allí y lo hizo bien aquí. Me gustaría conocer su verdadero potencial".