El líder del mundial salía desde el pit lane tras la sanción que recibió el sábado al no completar la sesión de clasificación con gasolina suficiente para el preceptivo análisis de los comisarios de la FIA. Desde la última posición, el alemán inició su recital de adelantamientos hasta alcanzar la tercera posición del podio, ante el pasmo de aficionados y rivales.

En su ascenso a los puestos de privilegio, Vettel dañó dos veces el alerón delantero, primero, al tocarse con Bruno Senna (Williams) en los giros iniciales, y ocho vueltas después, al llevarse por delante un hito del circuito por eviatar la colisión con Daniel Ricciardo (Toro Rosso) cuando estaba el coche de seguridad en pista. Todo ello le obligó a pasar por boxes muy pronto (en la vuelta 14) para cambiar el frontal y de paso, los neumáticos. No fue la única vez que se detuvo porque sus ruedas no iban a aguantar las 41 vueltas que faltaban para la bandera de cuadros, así que tuvo que volver a sustituir las gomas de su monoplaza. De los ocho primeros clasificados, Vettel fue el único que paró dos veces, y a pesar de ello subió al tercer peldaño del cajón dando una muestra inequívoca de que no quiere soltar un título mundial que podría adjudicarse en la próxima carrera.

Fernando Alonso también rozó la perfección en Abu Dabi. El asturiano salió en sexta posición, mermado por un Ferrari que nunca fue el más veloz en el circuito Yas Marina, pero logró cruzar la meta en segunda posición. Alonso sacó tajada en el arranque: superó a Jenson Button (McLaren) nada más empezar y adelantó a Mark Webber (Red Bull) antes de finalizar el primer giro para colocarse en cuarto lugar. Cuando ya se había cubierto el primer tercio de la prueba consiguió rebasar también a Pastor Maldonado (Williams). Por delante sólo quedaba Raikkonen, al que no llegó a alcanzar por muy poco.

Al final, victoria para el finlandés, la primera desde su regreso a la F1, segundo puesto para Alonso y podio para un Vettel que mantiene el liderato del mundial, ahora con 10 puntos de ventaja sobre el español, a falta de dos carreras para la conclusión del mundial.
Una de las escenas más espectaculares que nos deja el GP de Abu Dabi es el choque que protagonizaron Nico Rosberg y Narain Karthikeyan. El alemán se disponía a adelantar al piloto indio de HRT Formula1 Team cuando inexplicablemente se abalanzó sobre la parte posterior de su coche, que actuó como rampa de despegue para que el Mercedes pasara literalmente por encima de Karthikeyan. Ambos pilotos salieron indemnes pero sin opciones de seguir en carrera.
Pedro de la Rosa gestionó a la perfección una prueba que comenzó de forma irregular cuando una manta térmica se enganchó en una rueda de su monoplaza, motivo por el que no pudo realizar la vuelta de formación y tuvo que tomar la salida desde el pit lane. El piloto catalán finalmente acabó en 17ª posición.

La próxima cita del mundial, la penúltima ya, se disputará el 16, 17 y 18 de noviembre en el circuito inédito de Austin, que acogerá el GP de Estados Unidos.