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Raymond Narac y Patrick Pilet dieron al equipo IMSA Performance su segunda victoria
en una semana, al vencer la carrera Pro-Am del Donington GT Open contra todo pronostico.
Los tres coches del equipo galo tuvieron que salir desde la cola de la parrilla,
al ser cancelados todos sus tiempos de calificación por haber utilizado
neumáticos sin marcajes. Sin embargo, Narac-Pilet lograron imponerse, con
no menos de 29 segundos de ventaja sobre el Porsche Autorlando de Gião-Couceiro.
Un brillante tercer puesto recompensó los esfuerzos de Giacomo Ricci-Michele
Rugolo (Ferrari Advanced).
En GTS, Philipp Peter-Michal Broniszewski volvieron a ganar, por quinta vez
este año, por delante de los Aston Villois de Wiser-Lancieri y Guerrero-Petrini.
En la salida, el poleman Giacomo Ricci (Ferrari Advanced) conservó
el mando, por delante de Roda, Gião, Camathias, Monfardini, Giammaria
y Peter. Las primeras vueltas vieron la parada en boxes de Bamford por un problema
técnico y los trompos de Kuzminykh y Petrini, mientras que en cabeza,
el duelo entre Ricci y Giao era intenso, logrando el portugués adelantar
a su rival en la vuelta 8, imitado por Camathias dos rondas después.
Gião controló a Camathias, Ricci (todos ellos en apenas pocos
segundos), Roda, Monfardini, Giammaria y Narac (que había empezado a
remontar con contundencia) hasta el cambio de pilotos, con Couceiro tomando
el relevo sin problemas. Todo parecía inidicar que el dúo luso
tenía en sus manos su primer triunfo, pero Pilet estaba remontando a
fuerte ritmo y cuando cayeron unas gotas de agua, superó imparablemente
a Couceiro (vuelta 27), escapandose definitivamente hacia la victoria.
El espectáculo estaba más atrás, en la lucha por la tercera
plaza, con Rugolo defendiendose de los ataques de Lietz, Frezza and Fässler.
Frezza acabó embistiendo a Fässler (que dio un trompo), lo que posteriormente
le valió una penalización de 30 segundos.
La carrera de GTS fue dominada por el Ferrari Kessel de Peter-Broniszewski,
aunque esta vez le costó más de lo habitual resistir a los ataques
del Aston Villois de Wiser-Lancieri, con el otro Aston de Petrini-Guerrero tercero
(tras el abandono del Corvette de Alexander-Julià, con el radiador roto),
mientras que el debutante Jaguar apex de Jones-Clarke fue quinto.
